lunes, 3 de octubre de 2011

Luchando...!



…era una semilla cualquiera… una que, como todas las demás, se cae del árbol y es arrastrada río abajo sin control alguno, es engullida por profundas aguas y maltratada por duras corrientes… pero… cuando parece que todo está perdido y las opciones de supervivencia está a punto de agotarse, nuestra semilla se aferra a las rocas en aguas poco profundas y lucha… lucha en una batalla marcada por la supervivencia… al igual que esta semilla, en la vida nos encontraremos infinidad de cosas buenas flotando a nuestro alrededor… son como ángeles a la deriva atrapados en burbujas de vida… ignoremos aquéllas que contienen demonios… esos no nos permitirán encontrar la armonía suficiente como para discernir lo bello del camino… ¡lo bello de la vida!

4 comentarios:

  1. Me gusta tu blog, pero me gustaría verte reír en él. Un abrazo

    ResponderEliminar
  2. Cerrado por vacaciones4 de octubre de 2011, 14:25

    Hay momentos de la vida en los que me he sentido como "una semilla cualquiera", te caes del árbol y eres "arrastrada río abajo", "engullida por profundas aguas" sientes que aún queriendo, no eres capaz de arrancar, que no consigues parecerte a ti mismo... a lo que recuerdas de ti ... y mira que lo intentas!!!

    Luchas en la batalla de la vida, "en una batalla marcada por la supervivencia" como la semilla-superviviente de tu foto... que se "aferra a las rocas en aguas poco profundas" …y luchas por sobrevivir y... por encontrarte mejor, y por tirar hacia adelante, que en eso consiste básicamente y lo consigues… vuelves a apreciar "lo bello de la vida!" gracias a todas esas burbujas de vida que flotan a tu alrededor… Gracias!!!

    Supongo que nos ha pasado a casi todos... por cierto, me ha encantado eso de "infinidad de cosas buenas flotando a nuestro alrededor…ángeles a la deriva atrapados en burbujas de vida" es muy, muy bonito…

    bicos, risas y... burbujas de vida

    ResponderEliminar
  3. La vida de la semilla es como la nuestra, una continua lucha por la supervivencia. Por suerte, al final, siempre encontramos esa infinidad de cosas buenas flotando, pero no creo que debamos ignorar las cosas malas, a esos demonios como tú los llamas, pues de ellos también se aprende y te hacen más fuerte, lo que no se puede hacer es permitir que te venzan, eso nunca, hay que buscar la lección que te van a enseñar y, una vez aprendida, entonces sí podríamos ignorarlos o incluso olvidarlos, según la “categoría” de cada demonio.
    Preciosa foto. Un abrazo.

    ResponderEliminar
  4. Mensaje no tiene igual y la foto es maravillosa, puedo decir mucho pero para qué, con poco lo has dicho todo!! Preciosa reflexión mi querido amigo!

    Saludos y un gran abrazo!
    Bea

    ResponderEliminar