viernes, 18 de marzo de 2011

Si insistes... me voy...


Cada vez, más separados, persiguiéndonos, compartiendo la nada... intocables... así somos tu y yo... cada uno por su lado, cogidos de otra mano... a lo mejor es que no supe estar a la altura... o fuiste tú... quizá fueramos los dos... desconozco cuál ha sido mi error, quizás algún día me lo digas… como siempre, apenas consigo seguirte con la mirada, una vez más, observo cómo te evaporas en el horizonte y supongo que como en casi todo, tu versión será la opuesta…

Hay quién dirá que no se debe pensar tanto, que se debe disfrutar más el momento, sin dudarlo, olvidar, recuperar la espontaneidad... poco a poco... dejándose llevar… y estoy de acuerdo en que así debería ser, pero es difícil cuanto se echa tanto de menos el sentirte cerca... quizás lo que tenemos que hacer es aprender a disfrutar ese suspiro cuando el reloj nos lo conceda… aunque, de nuevo contemplamos el pasado, vemos el presente, pensamos en el futuro... y una vez más, observo como te desvaneces... ¡maldita sea, voy a perder la razón!

***

El orgullo puede resistir mil juicios.
Los fuertes nunca caerán.
Pero al mirar las estrellas sin ti, mi alma llora.
El corazón me sube y me baja, lleno de dolor.
Oh, oh, el dolor.
Porque te estoy besando, oh,
te estoy besando, oh.
Acaríciame mucho,
puro y verdadero regalo para mí­, para siempre.
Porque te estoy besando, oh,
te estoy besando, oh.
Dónde estás ahora?
Dónde estás ahora?

1 comentario:

  1. mucha fuerza, mucho sentimiento, pero mañana volverá a salir el sol, de eso estate seguro.

    ResponderEliminar